Por  COLECTIVA - FIV

Desde la Colectiva de mujeres Exiliadas Refugiadas y Migradas en España y

 

 el Foro Internacional de Víctimas del Conflicto armado en Colombia FIV. 

Tenemos que lamentar  como este 8 de Marzo está  atravesado por situaciones contradictorias  para  las Mujeres en Colombia y en el Mundo, por ende para las nosotras que hemos puesto nuestra esperanza en la firma del acuerdo de paz con las FARC EP y el inicio del proceso con el ELN lo que significa un avance para alcanzar la Paz con Justicia Social y de Genero que además beneficia al Continente y al Mundo entero. De otra parte vemos con preocupación cómo los paramilitares que se oponen a la Paz, se vienen ensañando asesinando a  las Lideresas y Lideres de las Organizaciones Sociales buscando impedir que el País avance en los cambios que anhelamos. 

 

Estamos viviendo con preocupación para  el mundo la amenaza que representa el modelo Neoliberal, la crisis de los y las Refugiadas y las implicaciones con la actual Administración de EE.UU. por lo que las mujeres de la  diáspora nos implicaremos apoyando el Paro Internacional propuesto por el movimiento Feminista de varios países para hoy 8 de Marzo, donde también reivindicaremos la agenda que hemos elaborado: desde proponer que nos permita hacer realidad nuestra participación activa como ya lo hemos hecho en el  proceso de la Habana y que en el nuevo escenario de negociación en Quito, logremos reforzar nuestras propuestas, estamos demandando participar en la implementación de los acuerdos y la reforma de la Ley de víctimas y restitución de tierras.  Tanto La colectiva como el FIV   venimos organizando actividades para responder a estos procesos con responsabilidad y a la altura del momento político, sin embargo asistimos a este 8  de Marzo con la preocupación y la indignación por los hechos de dolor que enlutan nuestro país tanto por el atentado de la macarena pero sobre todo por la persecución asesinato y amenaza contra lideresas y defensoras defensores de DD. HH. , sin que a la fecha tengamos garantías para que estos hechos no se queden en la impunidad. Demandamos del Gobierno cumplir con los acuerdos y recomendaciones de índole Nacional e Internacional que garantice la vida de las Defensoras y Defensores de Derechos Humanos, brindar protección a las Comunidades más desfavorecidas a la vez que solicitamos la más amplia solidaridad de la comunidad internacional  y de todas aquellas organizaciones que nos han venido apoyando, nos planteamos la urgencia también de un cese bilateral al juego entre el gobierno colombiano y el ELN, Y AFIRMAR QUE NO QUEREMOS UNA MUERTE MAS .ni por la guerra, ni por la violencia machista en Colombia, ni en el mundo.